Fue enviado a Canadá de forma urgente por avión y envuelto en papel de aluminio para evitar posibles borrados remotos si alguien detectaba el traslado
El ordenador pertenecía al profesor Joan Matamala y ejercía de nodo para concentrar la información de varios espiados
Una vez en Canadá, los expertos de Citizen Labs monitorizaron su funcionamiento para confirmar el envío de datos furtivos a terceras personasfue embarcado de forma urgente desde el aeropuerto de Barcelona en la bodega de un vuelo con destino a Canadá. Era el final de una operación relámpago. Un traslado organizado desde el despacho del abogado Gonzalo Boye en Madrid y que acabó con el ordenador personal de un profesor universitario desvelando.
Entre 2019 y 2020, siempre según los datos de Citizen Labs, el teléfono de Matamala fue infectado por el programa espía Pegasus en 16 ocasiones. Sin embargo, en esta ocasión los expertos canadienses detectaron que era su ordenador quien ejercía de buzón para.
Allí, los peritos confirmaron que el aparato había sido infectado con el malware Candiru, que había entrado en el ordenador por un agujero de seguridad que en ese momento no se conocía dentro del sistema operativo de Microsoft. EEn julio de 2021, con la información de Citizen Lab y tras analizar el ordenador de Matamala, Microsoft sacó un parche de seguridad que corregía este agujero.