Por qué la 'inflamación administrativa' socava la eficacia académica de la Universidad Expansioncom
Cada vez más docentes se sienten frustrados por el peso que alcanza la gestión de gastos, la administración y la burocracia, que les distrae de su tarea principal de enseñar e investigar. El personal y los procedimientos superfluos pueden acabar absorbiendo recursos, ralentizando el cumplimiento de logros y socavando la función de las universidades.
Recientemente argumentó en un blog que el personal universitario debe proceder de universidades mayores para contrarrestar el exceso de trabajo administrativo, de igual forma que los conglomerados del sector privado también se han ido dividiendo a lo largo de los últimos años."Básicamente, las universidades están sofocando las capacidades de su propio personal".
, publicado a finales del año pasado junto con Andrew Jenkins, profesor adjunto del Instituto de Investigación Social del University College de Londres, Wolf hace un seguimiento del crecimiento desproporcionado en el número de administradores y personal no académico en las universidades de Reino Unido.
Sin embargo, Daniels defiende el crecimiento de estas funciones especializadas junto con el de los puestos académicos, al menos cuando se aplican correctamente."Los estudiantes demandan estos servicios de ayuda, y cuando ves que tienen problemas importantes de ansiedad o trastorno de déficit de atención, es mejor que no reciban ayuda de gente mal formada, sino de profesionales, que sepan gestionar esos problemas", sostiene.
Devinney coincide con esta opinión, y señala una relación más estrecha con el personal docente en ciertas universidades de Estados Unidos, donde los altos gestores son, con frecuencia, antiguos alumnos, que conocen ampliamente, y en profundidad, la institución; o de Australia, donde él mismo abogó por ofrecer a los empleados la oportunidad de recibir clases gratuitamente, para que así su misión fuera más compartida.