OPINIÓN | No, la segunda vuelta en Chile no será elegir entre dos extremos Por: JorgeGCastaneda
Se puede argumentar que, en realidad, la elección se juega entre un extremista de derecha que no necesita buscar desesperadamente votos de centro, y un candidato de izquierda que sí los necesita, pero que además viene de lo que ya es una tradición de centro-izquierda en Chile.
En cambio, en mi opinión, Boric podría saber que sus electores radicales –sobre todo los del Partido Comunista– lo pueden ver a él como la mejor opción para votar por él, aunque no tiene camino a la victoria si no consigue todos los votos del centro y del resto de la izquierda y de algunos votantes que se abstuvieron en la primera vuelta.
Ni fue autoritaria, ni fue estatista, ni cerró la economía, ni se alineó con Cuba o Venezuela. Muchos le reclaman a la Concertación haber conducido al país al impasse económico, político y social que desembocó en las protestas masivas de octubre de 2019.
Aunque su carrera política comenzó con las protestas estudiantiles de 2011, y buena parte de los antiguos dirigentes o partidarios de la Concertación no lo respaldaron en la primera vuelta, Boric viene de allí.
Esta interpretación de la elección chilena contradice el análisis de varios observadores del país o extranjeros. También contrasta con la visión de una nueva marea rosa en la región, impulsada por movimientos sociales y reacciones ante la desigualdad.