Isabel II, la monarca inesperada que marcó una era con 70 años en el trono
- y conoció a 14 presidentes de Estados Unidos y siete papas, vio la celebración de 18 juegos olímpicos, la entrada y posterior salida del Reino Unido de la Unión Europea, la disolución de la URSS e incluso . Y en este largo período supo adaptarse a los nuevos tiempos, sin que una institución como la monarquía británica haya perdido su esencia y sus tradiciones.
, tras la renuncia del novio a su religión, la ortodoxia griega, y recibiendo el título de duque de Edimburgo.un discreto segundo plano en los momentos de mayores dificultades de su reinado . Aunque el matrimonio, un ejemplo de longevidad, no estuvo a salvo de crisis y de continuos rumores de infidelidades por parte del duque, a quien le costó asumir el rol secundario en la pareja.