Aragonès envía un mensaje claro en Madrid: no basta con reuniones, pide culpables
por parte del Gobierno, ya amenaza abiertamente con romper la mayoría de la investidura. Los 13 escaños de ERC son claves para la mayoría de las leyes. Los republicanos han trasladado ya un mensaje claro al Ejecutivo, en público y sobre todo en privado: si quieren recuperar la confianza, necesitan que alguien asuma responsabilidades: esto es, que ruede alguna cabeza política.
comisión de investigación sobre este escándalo —incluido Unidas Podemos, miembro de la coalicion de Gobierno— Desde el Ejecutivo insisten en que el contacto con la Generalitat es permanente, no solo entre presidentes sino entre los equipos —sobre todo Óscar López, el jefe de Gabinete de Sánchez, y Sergi Sabriá, que lidera el de Aragonès— para buscar una solución. La voluntad del Ejecutivo, añaden fuentes del Gobierno, es la de dar todos los pasos necesarios para recuperar la confianza.