❄La llegada del invierno es sinónimo de temperaturas más bajas y, con ellas, llegan determinados riesgos para nuestra salud que se asocian directamente con el descenso de los termómetros
La temperatura corporal media del ser humano oscila entre los 36,3 y los 37,1ºC, aunque puede haber cierto 'baile' de cifras en función de cada persona.y, en general, es habitual que notemos malestar generalizado mientras no entremos en calor. También es posible que nuestra piel se irrite , que tiritemos y que nuestro sistema nervioso y nuestro corazón entren en estado de alerta, con todas las consecuencias que ello puede conllevar.
predispone a la formación de trombos en las arterias cerebrales y coronarias, así como al aumento de la presión arterial,nuestro sistema inmunológico suele resentirse con el frío. Este es uno de los motivos por los que las gripes y resfriados son más frecuentes durante el invierno, pero no el único.que en un ambiente cálido, y soportan mejor un clima seco que un clima húmedo. Por tanto, durante el invierno se produce un ambiente perfecto para su supervivencia y proliferación en comparación con otros momentos climatológicos del año.